Narciso García Yepes (Lorca, 14 de noviembre de 1927 - Murcia, 3 de mayo de 1997), más conocido como Narciso Yepes, fue un guitarrista clásico español.
Cuando cumplió los 13 años, comenzó a estudiar en el Conservatorio de Valencia con Vicente Asencio, famoso pianista de la época.
En 1947, interpretó en público por vez primera el Concierto de Aranjuez (de Joaquín Rodrigo), bajo las órdenes del director Ataúlfo Argenta, lo cual le mereció celebridad inmediata. En 1952, según su propia declaración, rescató y recompuso una canción tradicional para guitarra: Romance (anónimo), pieza musical incluida en la película Juegos prohibidos (Jeux Interdits, del director René Clément, 1952).
En 1958 se casa con una joven polaca, estudiante de filosofía, llamada Marysia Szumlakowska; con la que tuvo tres hijos: Juan de la Cruz (muerto en un accidente a los 18 años), Ignacio Yepes (compositor, flautista y director de orquesta), y Ana Yepes (bailarina y coreógrafa).
En 1964, Yepes comienza a utilizar su creación: la guitarra de diez cuerdas, pues de ella obtenía mucho mejor resonancia y a la vez le facilitaba el tocar piezas de música barroca (originalmente escritas para laúd). Le incitó a la creación de esta nueva guitarra el desequilibrio sonoro debido a la falta de buena parte de los armónicos naturales en la guitarra de seis cuerdas.
Afinación de la guitarra de diez cuerdas según Narciso Yepes.
El ingente repertorio de Narciso Yepes, aumentado por numerosas transcripciones de música de todas las épocas es, con seguridad, el más rico de todos los tiempos. La publicación de sus transcripciones y revisiones de partituras así como las múltiples grabaciones realizadas a lo largo de su carrera son referencia para estudiantes de guitarra de todo el mundo.
A partir de 1993, Narciso Yepes empezó a limitar sus apariciones públicas, debido a problemas de salud. Su último concierto fue en Santander, el 1 de marzo de 1996. Su gran trayectoria musical le hizo merecedor de multitud de premios y menciones. Murió en 1997 a causa de un cáncer linfático. Por voluntad propia sus cenizas fueron entregadas a la Comunidad de Monjas del monasterio de Santa María de Buenafuente del Sistal en la provincia de Guadalajara al que se sentía muy unido. Fue nombrado Amigo ilustre de Buenafuente.